El running barefoot, o correr descalzo, es una práctica en la que se corre sin usar calzado o utilizando calzado minimalista que imita la sensación de estar descalzo. Esta forma de correr busca emular la manera en que los humanos lo hacían antes de la invención del calzado moderno, promoviendo una técnica de carrera más natural.
Modelos Barefoot para Running
Veamos a continuación algunos de nuestros modelos de calzado barefoot deportivo. Si piensas en running recomendamos aquellos que se adapten bien al pie y que sean ligeros, que suele ser la gran mayoría del calzado que tenemos en Impala.
Principales características del running barefoot
Correr descalzo o con calzado minimalista requiere una técnica adecuada para aprovechar al máximo sus beneficios y minimizar el riesgo de lesiones.
Es esencial prestar atención a la forma de pisar, lo que permite una distribución más equilibrada del impacto y reduce el estrés en las articulaciones.
Además, este estilo de carrera fortalece los músculos del pie, mejora la postura y fomenta una conexión más natural con el terreno. Sin embargo, para disfrutar plenamente de esta experiencia, es crucial elegir un buen calzado minimalista que respete la forma natural del pie, ofrezca protección sin interferir con el movimiento y permita sentir el suelo. En Impala Barefoot, te ayudamos a encontrar el calzado ideal, adaptado a tus necesidades y preferencias, para que puedas hacer tu transición barefoot hacia una forma de correr más saludable, natural y libre.

Técnica de carrera:
- El impacto inicial suele ocurrir con la parte delantera o media del pie, no con el talón, como es común al usar calzado amortiguado.
- Esto genera un menor impacto en las articulaciones, ya que se aprovechan las propiedades naturales de amortiguación del pie y la pierna.
Beneficios del running barefoot:
- Mejora de la técnica: Fomenta una pisada más ligera y eficiente.
- Fortalecimiento del pie: Los músculos intrínsecos del pie se activan y desarrollan más que al usar calzado convencional.
- Conexión sensorial: Permite sentir el terreno y adaptar la pisada, mejorando el equilibrio y la propriocepción.
- Prevención de lesiones: Puede reducir problemas asociados con el calzado, como las ampollas o el dolor por impacto excesivo.